Después de seis años, la familia tuvo un segundo hijo que también padece esta enfermedad genética… Patricia Williams dio a luz a su tercer hijo, Redd, en 2012. Redd nació con un cabello blanco inusual y unos ojos almendrados cautivadores. Al principio, los médicos y los padres pensaron que el niño simplemente era rubio, pero a medida que Redd fue creciendo, quedó claro que padecía albinismo.
Los médicos empezaron a preguntar si algún miembro de la familia padecía esta enfermedad. Tras reflexionar detenidamente, la pareja recordó finalmente que Patricia, su abuela de 85 años, había nacido rubia platino y era la única que vivía en una reserva india. Ella era albina, pero nunca se dio cuenta, aunque los médicos encontraron pruebas de lo contrario. Sin embargo, los genes se heredan, ya que no pueden ser ocultados.
Por cierto, su abuela encontró en la colección una foto de ella y sus familiares indígenas, en la que ella era la única rubia. Después de seis años, la familia tuvo un segundo hijo que también padece esta enfermedad genética. Los niños crecen sanos y fuertes, y aparte del color de su cabello y ojos, la enfermedad no ha mostrado ningún otro signo de manifestación. Las agencias de publicidad ya están contactando al gran Redd con ofertas de sesiones de fotos para sus clientes.
Los padres de Rockwell, de 2 años, y Redd, de 9 años, encuentran divertida la atención especial que reciben sus hijos. Y no les molesta que los transeúntes tomen fotos de los niños, siempre y cuando no les cause ningún problema.
